Los activos de una empresa pueden ser bienes tangibles como equipos de trabajo o intangibles como inversiones, por lo tanto, la gestión de estos activos es un factor clave para la estabilidad de cualquier organización.
Pero, ¿realmente conoces la importancia de ubicar los recursos que le pertenecen a la empresa? En este artículo, te explicamos cómo una gestión de activos eficiente puede marcar la diferencia en la rentabilidad y sostenibilidad de un negocio. ¡Comencemos!
La gestión de activos es el conjunto de estrategias que tienen como objetivo supervisar, mantener y optimizar los recursos de una empresa.
Cuando mencionamos los recursos de la organización, estamos hablando desde laptops hasta escritorios, sillas o incluso documentación importante de los colaboradores. Sin importar si es tangible o intangible, es necesario que las organizaciones pongan especial cuidado en cada activo, pues al darle un manejo adecuado, se maximiza su vida útil y además disminuyen considerablemente los costos innecesarios.
Por supuesto que al tener un buen control sobre los activos, es posible lograr una mejor toma de decisiones financieras y a su vez, prevenir riesgos.
Los activos de una empresa pueden clasificarse de la siguiente manera:
Activos físicos |
Equipos de trabajo, vehículos, escritorios, fotocopiadoras, etc. |
Activos digitales |
Software, bases de datos, documentos, sistemas de información, etc. |
Activos financieros |
Inversiones, cuentas por cobrar y efectivo. |
Activos humanos |
Talento, habilidades y conocimiento del equipo de trabajo. |
Tener el control empieza por saber qué tienes. Si una empresa quiere asegurarse de que sus activos están en orden, el primer paso es saber con claridad con qué cuenta.
Un inventario preciso es la base de una buena gestión pues mantiene todo funcionando como debe.
Así que, ¿Por qué implementar un sistema de gestión de activos? Aquí algunas razones clave:
Ahora, es momento de hablar acerca de las ventajas que trae consigo el aplicar un enfoque estructurado para la administración de activos, entre algunas de las más importantes están:
Para ser más claros, veamos un ejemplo en el panorama de una organización cuando se realiza una gestión de activos y cuando no.
Antes de una gestión de activos: Nadie sabía exactamente cuántos equipos había disponibles. Algunos se perdían en el inventario, otros se descomponían sin previo aviso. Las compras se hacían a último momento, duplicando gastos sin querer. La planeación financiera se llevaba a cabo por intuición, no por estrategia.
Después de una gestión de activos: Cada activo está identificado, registrado y en buen estado. Los mantenimientos se hacen a tiempo, las compras se planifican con base en datos reales, los colaboradores siempre tienen a la mano lo que necesitan y las auditorías no quitan el sueño. Las decisiones financieras se toman con claridad, respaldadas por información precisa sobre el estado y valor de los recursos.
¿Qué tal? La diferencia es evidente, al aplicar un enfoque estructurado en la gestión de activos es posible ahorrar, prever y operar con inteligencia.
Implementar una gestión de activos sólida no solo implica tener el control de lo que se tiene, sino también aplicar una serie de estrategias que faciliten el proceso. Para lograrlo, es importante apoyarse en prácticas clave como las siguientes:
¡Plus tip! Categorizarlos facilita su monitoreo, administración y toma de decisiones a futuro.
¡Plus tips! Próximamente Buk podrá ayudarte con este proceso, el cual será agilizado gracias a su alta tecnología.
¡Plus tip! Prevenir ahorra tiempo, dinero y dolores de cabeza.
¡Plus tip! Agendar con tiempo dichas auditorías puede ayudarte a optimizar el tiempo.
¡Plus tip! Añade esta información en la capacitación, así el colaborador sabrá cómo cuidar los activos desde el principio.
Cada activo pasa por diferentes fases desde su adquisición hasta su retiro. Estas incluyen:
También es importante mencionar las leyes relacionadas con gestión de activos en México, pues estas varían según el sector y la naturaleza de los mismos.
A continuación, te contamos las leyes más relevantes:
¡Atención! No olvides que aunque estas leyes cubren aspectos clave sobre la gestión de activos financieros, las reglas que se aplican pueden variar según el tipo de activo y el sector en el que opere la organización.
La tecnología hoy en día facilita muchos procesos, entre ellos, la gestión de activos y como sabes, existen diversas soluciones digitales para mejorar la administración de activos, como:
Antes de elegir una herramienta digital que te facilite la gestión de activos, piensa en que no solo garantizará el uso eficiente de los recursos, sino que también impulsará la utilidad de la empresa, así que evalúa muy bien cuál es tu mejor opción.
Diseñado para adaptarse al ciclo de vida de cada colaborador, la gestión de activos te permitirá centralizar y automatizar el control de activos físicos y digitales, además de facilitar la administración desde un solo lugar.
Al dejar la gestión de activos en manos de Buk, mejorarás la eficiencia operativa, reducirás costos innecesarios y tomarás decisiones más inteligentes sobre el uso de tus recursos. Todo esto desde una plataforma intuitiva.
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