La prima de antigüedad es un derecho laboral importante en México que representa un beneficio económico adicional para quienes han dedicado largos años de servicio a la misma empresa. Establecida en el Artículo 162 de la Ley Federal del Trabajo, esta prestación se otorga como un reconocimiento a la lealtad y compromiso de los colaboradores con su lugar de trabajo.
Para los departamentos de Recursos Humanos, asegurar que la prima de antigüedad se calcule y otorgue correctamente es clave para cumplir con las obligaciones legales y reconocer la trayectoria de los empleados. Ya sea al momento de una renuncia voluntaria o al concluir la relación laboral por otra causa, entender cómo y cuándo debe entregarse esta prestación permite a las empresas retribuir el tiempo de servicio de forma justa.
Si quieres saber cómo funciona este beneficio y cómo garantizar que se aplique correctamente en tu organización, sigue leyendo para conocer todos los detalles.
La prima de antigüedad es una prestación laboral obligatoria destinada a reconocer y recompensar la lealtad y el tiempo de servicio de los empleados que han dedicado un periodo considerable en una misma empresa. Este beneficio se otorga en diversas situaciones, como despidos sin causa justificada, renuncias voluntarias después de alcanzar un tiempo de servicio significativo y, en ciertos casos, al cumplir años específicos de antigüedad.
En México, la Ley Federal del Trabajo establece que los colaboradores con más de 15 años de servicio tienen derecho a recibir el equivalente de 12 días de salario por cada año trabajado, con un límite en el salario base que se utiliza para calcular esta prestación. Este pago busca brindar seguridad económica a los trabajadores que dejan la empresa después de una larga trayectoria laboral.
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La prima de antigüedad es importante porque incentiva la permanencia de los colaboradores en la empresa, promoviendo así estabilidad laboral y reduciendo la rotación de personal. Al ofrecer esta compensación, se reconoce el valor de la experiencia y dedicación del trabajador. Además, es una protección adicional que asegura un respaldo económico al colaborador en caso de terminar su relación laboral, ya sea por decisión propia o de la empresa.
Para los equipos de Recursos Humanos, gestionar y calcular adecuadamente la prima de antigüedad no solo implica cumplir con sus responsabilidades patronales, sino también potenciar la cultura organizacional.
Por esta razón te compartimos una breve guía paso a paso para el cálculo de la prima de antigüedad.
Para este ejercicio tomaremos en cuenta el caso de Alejandra, una dedicada colaboradora que ha sido parte de una empresa durante 15 años y cuyo salario mensual es de $12,000 pesos.
Paso 1: Obtén el Salario Diario
Para ello dividimos su salario mensual entre 30 días:
Salario Diario = $12,000 mensuales / 30 días = $400 por día
Paso 2: Multiplica el Salario Diario por los 12 Días establecidos por la ley.
Compensación =$400 (Salario Diario) * 12 días = $4,800
Paso 3: Multiplica esta compensación por los Años de Servicio de Andrea en la compañía, que en este caso son 15 .
Prima de Antigüedad = $4,800 * 15 = $72,000
Por tanto, Alejandra estará recibiendo $72 mil pesos por concepto de Prima de Antigüedad
De acuerdo con el Artículo 485 de la Ley Federal del Trabajo, la cantidad base para el cálculo no puede ser inferior al salario mínimo establecido por la Federación. Si el salario base supera el doble del salario mínimo, se considerará esa cantidad como salario máximo.
1. Seguridad Económica para los Empleados
La prima de antigüedad proporciona una compensación adicional que contribuye a la estabilidad financiera de los trabajadores al momento de dejar la empresa, especialmente en casos de despido. Este pago es un respaldo económico importante para aquellos empleados que, tras años de servicio, enfrentan una transición laboral.
2. Reconocimiento al Compromiso y Lealtad
La prima de antigüedad representa una forma de reconocimiento a la lealtad y dedicación de los colaboradores que permanecen en la empresa a lo largo del tiempo. Esta prestación refuerza la percepción de que la organización valora su contribución y años de servicio, fortaleciendo la relación laboral.
3. Fomento a la Retención del Talento
Ofrecer este tipo de prestaciones puede ser un factor clave para la retención de talento. Los colaboradores pueden sentirse más motivados a permanecer en la empresa al saber que existe una compensación futura, lo cual beneficia a la organización al reducir la rotación y los costos asociados al reemplazo de personal.
4. Mejora de la Reputación de la Empresa
Cumplir con la prima de antigüedad refleja el compromiso de la empresa con el bienestar de sus trabajadores y con el cumplimiento de la ley. Esto no solo mejora la reputación de la organización como empleador responsable, sino que también atrae a nuevos talentos que valoran un ambiente laboral justo y equitativo.
5. Contribución a un Ambiente Laboral Positivo
Al contar con una prestación que reconoce la trayectoria y antigüedad de los colaboradores, se fomenta un ambiente de trabajo más positivo y estable. Los colaboradores se sienten apreciados y respaldados, lo que contribuye a un clima laboral más saludable y colaborativo.
Como parte del equipo de Recursos Humanos o nómina, debes saber que la prima de antigüedad se paga a un colaborador al terminar la relación laboral. Sin embargo, también debes tomar en cuenta otros requisitos y consideraciones:
La prima de antigüedad se otorga cuando un colaborador decide renunciar voluntariamente a la empresa. En este caso, el reconocimiento económico respalda la decisión personal del trabajador.
Si el colaborador abandona la empresa debido a una causa justificada, aún tiene derecho a la Prima de Antigüedad. En este escenario, las causas a tomar en cuenta están establecidas en el Artículo 51 de la LFT, entre las cuales se encuentran:
En caso de un despido justificado o injustificado, el trabajador también tiene derecho a la prima de antigüedad al ser finalizada la relación laboral por parte del patrón. Esto, siempre y cuando, tenga 15 años o más laborando en la compañía.
En cuanto a las causas justificadas, estás se establecen en el Artículo 47 de la Ley Federal del Trabajo, entre las cuales se incluyen:
En el caso de fallecimiento del trabajador, sus beneficiarios tienen derecho a recibir la Prima de Antigüedad, honrando así el compromiso laboral incluso en circunstancias difíciles.
Aquellas personas que no pueden trabajar debido a discapacidad física o mental, terminación laboral por causas de fuerza mayor o declaración de quiebra de la empresa también tienen derecho a recibir la Prima de Antigüedad.
Por último, es importante recordar que, tal y como sucede con otras remuneraciones, por ejemplo, el aguinaldo al final del año, la prima de antigüedad deberá pagarse de forma económica y no puede ser sustituida por otro tipo de pago o remuneración.
La prima de antigüedad es una de las prestaciones más importantes en la relación laboral, tanto para empresas como para los colaboradores. Por tanto, es fundamental contar con procesos organizados transparentes que permitan gestionar este pago adecuadamente a fin de evitar errores que puedan derivar en multas, sanciones o malentendidos.
Algunos consejos clave que puedes implementar para gestionar esta prestación de forma eficiente en tu compañía son:
Como la gran mayoría de las prestaciones establecidas en la Ley, la prima de antigüedad es un proceso que debe hacerse con sumo cuidado, pues un error podría llevar a la empresa a ser acreedora a una multa por parte de la autoridad, o peor aún, afectar la reputación de su marca empleadora.
Afortunadamente, hoy en día existen algunas herramientas que simplifican la gestión y el cálculo de pagos como la prima de antigüedad, y ayudan a las empresas a evitar multas y a determinar el pago de forma rápida y confiable.
Una de las herramientas más confiables es el software de nómina, pues el sistema permite llevar el registro del salario diario, antigüedad, expedientes de colaboradores y otros aspectos que facilitan la determinación de esta prima.
De esta forma, los equipos de Recursos Humanos y nómina pueden depender menos de cálculos manuales y evitar errores de contabilidad y confiar que están entregando la cantidad adecuada a los colaboradores al terminar la relación laboral.
Así mismo, es importante asegurarse que el sistema en cuestión te garantice que su funcionamiento está apegado a la legislación vigente y te garantice cálculos precisos en la determinación de la prima y otras prestaciones.
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Recientemente, los legisladores han propuesto una reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) que busca aumentar la prima de antigüedad de 12 a 15 días de salario por cada año laborado, además de reducir de 15 a 13 años el periodo mínimo de servicio necesario para acceder a esta prestación.
Esta propuesta también sugiere que dicha prestación sea imprescriptible, asegurando su pago en cualquier momento tanto para los trabajadores como para sus beneficiarios.
Los encargados de impulsar esta reforma señalan que se mantendrían los criterios actuales de la LFT para otorgar esta prima, por lo que seguirán recibiendo la prima de antigüedad tanto si se separan voluntariamente de su puesto como en casos de despido, ya sea justificado o injustificado.
En este sentido, es crucial que los equipos de RR.HH. se mantengan al tanto de esta noticia y los cambios legales, ya que esto podría implicar ajustes significativos en la administración de las prestaciones laborales.
El pago de la Prima de Antigüedad no es solo un gesto económico, sino también una inversión en la experiencia integral del ciclo de vida del colaborador y una retribución justa por el esfuerzo continuo y la lealtad, creando un ambiente laboral donde el tiempo invertido se valora.
Más allá del impacto en el colaborador, este tipo de reconocimiento contribuye a la fortaleza de la marca empleadora. Una organización que muestra respeto y aprecio por la antigüedad de sus empleados crea una reputación positiva en el mercado laboral, lo que resulta en una mayor capacidad de atracción y retención de talento. Al valorar el compromiso de sus colaboradores, la empresa no solo logra diferenciarse, sino que también se consolida como un lugar donde las personas desean desarrollarse a largo plazo.
Finalmente, cumplir con esta prestación no es solo una obligación legal, sino también un deber ético que favorece relaciones laborales sólidas y armoniosas. Asegurar el pago correcto de la prima de antigüedad refuerza el compromiso de la empresa con los derechos de sus empleados, promoviendo una cultura de respeto y confianza.
Por último, no olvides que la prima de antigüedad va más allá de ser una transacción financiera; es un símbolo de aprecio hacia aquellos que han invertido tiempo y esfuerzo en una empresa.
Desde la justa retribución por años de servicio hasta las implicaciones en la marca empleadora y el cumplimiento legal, este reconocimiento contribuye a construir relaciones laborales sólidas y a fortalecer la reputación de la empresa.
Al valorar la dedicación de los colaboradores, se construye un camino hacia un ambiente laboral exitoso y, sobre todo, feliz.
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