Autor:
Buk
| 4 Minutos de lecturaToda empresa sabe lo costoso que es contratar a la persona equivocada. Desde el tiempo y recursos para ocupar la vacante, hasta un mal clima laboral o afectaciones a la productividad, un mal elemento puede ser desastroso para cualquier organización.
Por esta razón, el proceso de reclutamiento y selección de personal debe estar optimizado al máximo en cada una de sus fases. Es tan importante la creación del perfil idóneo como la implementación de todo el proceso de pruebas y evaluación de candidatos.
Reclutamiento y selección de personal ¿qué es?
Es el método utilizado por toda organización para elegir a la persona idónea para ocupar un puesto de trabajo, de entre un grupo de candidatos. Así el reclutamiento y selección consiste en una serie de pasos diseñados exclusivamente para encontrar a la persona que cumpla con el perfil de la vacante disponible.
Para llevar a cabo cada paso, es necesario que las empresas empleen departamentos de recursos humanos y profesionales a cargo de diseñar e implementar la metodología de forma que nunca pierdan de vista el interés de las personas como el principal elemento de toda organización.
Y entonces, ¿cómo funciona el proceso de reclutamiento y selección? Veamos.
Etapas de selección: encontrando al profesional indicado
Más allá de definir los conceptos de reclutamiento y selección de personal -que tienden a confundirse-, lo importante es entender que se trata de un gran proceso que se divide por etapas.
El volumen de trabajo depende de la cantidad y tipo de las vacantes, así como del número de candidatos disponibles. Mientras más especializado es el perfil, el proceso suele tomar más tiempo y es más minucioso. Las etapas de selección son:
1. Definición de las necesidades
El primer paso es definir o aclarar cuáles son las necesidades de la empresa. Es decir, se debe realizar un análisis interno para saber el rendimiento, si se están cumpliendo o no las metas, y si el personal que allí trabaja es suficiente para lograrlas o es la hora de contratar nuevos talentos.
Una vez aclarado lo anterior, es momento de realizar un perfil del cargo, asegurándose que cubra las necesidades de la vacante como son sus calificaciones, competencias, conocimientos o experiencia previa. Esto es clave para que al llegar a las etapas posteriores, tengas información suficiente para realizar una entrevista laboral efectiva y con sentido.
2. Reclutamiento
Este es el momento en que la empresa comienza a buscar candidatos a través de diversos medios. Normalmente publica la vacante en distintas bolsas de trabajo y en las plataformas como LinkedIn, Indeed, o Reqlut.
Para encontrar al mejor candidato, el perfil debe estar claramente definido y la oferta de trabajo requiere estar bien definida y con todos los detalles y requisitos necesarios de la plaza disponible.
3. Selección
Una vez que hayas descartado los aspirantes que no cumplen con el perfil, es momento de seleccionar a los más idóneos o atractivos para el cargo. En este punto vale la pena precisar que las etapas de selección son diversas y dependen de las estrategias utilizadas para interactuar con el candidato.
Por ejemplo, puedes realizar pruebas de habilidades y competencias para el cargo, o aplicar evaluaciones psicométricas y psicológicas para conocer mejor a los participantes y saber si estás ante la persona indicada o no.
4. Onboarding
Una vez que has encontrado a la persona idónea necesitas incluirla en el equipo de una forma efectiva y amigable. Para eso está el onboarding. Es el proceso progresivo y planificado de recibimiento de los nuevos integrantes de la empresa y es importante porque representa la imagen que el negocio muestra ante sus colaboradores.
En esta etapa debes centrarte en la persona que se va a integrar en el equipo. Realiza acciones para que el nuevo trabajador se sienta parte de la empresa desde el minuto uno y no corra el riesgo de sentirse aislado.
Esto lo consigues brindando información clara, presentando al nuevo miembro y entregándole todas las herramientas para que se incorpore armoniosamente a la organización, lo que facilitará que se sienta más motivado y contento con su nuevo empleo.
Con un software especializado, todo esto es más simple
Adaptar tu proceso de selección a las nuevas tecnologías es la mejor forma de aumentar la productividad del reclutamiento. De hecho, según el Observatorio de RRHH, “esta capacidad de combinar y recombinar las tecnologías con las personas y aprovechar las innovaciones existentes es el núcleo de la innovación exponencial; algo que está revolucionando la gestión del talento”.
La automatización en el proceso de publicar las ofertas y filtrar a los candidatos, y el uso de tecnologías que permitan encontrar el perfil indicado son solo algunos beneficios que puede ofrecerte un software de recursos humanos como Buk.
Con Buk, puedes optimizar al máximo las labores de reclutamiento y selección de candidatos, realizando un seguimiento detallado durante todo el proceso, tanto para búsquedas internas como externas. Así, podrás encontrar a los profesionales mejor capacitados para determinados puestos, mejorando el rendimiento de tu empresa y ganando terreno por sobre la competencia.
